Nuevos sistemas de reducción acústica en los aeropuertos
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) han desarrollado dos sistemas para hacer más 'inteligentes' a los métodos de medición de la contaminación acústica que generan los aeropuertos.
Un grupo de investigadores de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales y de la Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) ha creado y patentado dos sistemas que permiten dotar de un cierto nivel de inteligencia a los métodos que se emplean para medir el ruido generado por los aeropuertos.
Aunque la medida de ruido en áreas aeroportuarias viene realizándose desde hace décadas, no fue hasta 2009 cuando se desarrollo una normativa internacional de medida. Con esta investigación se pretende analizar dicha norma y los factores que afectan a la precisión y a la exactitud de la medida bajo esta norma, es decir, identificar las causas de incertidumbre.
Inicialmente, los resultados pusieron de manifiesto que las técnicas para la detección y clasificación de sonidos que emplean los sistemas de medición comerciales son muy básicas. Esto implica que las medidas en ambientes muy contaminados por otras fuentes sonoras (aparte de los aviones) pueden tener alto grado de incertidumbre (baja precisión y/o exactitud).
El monitor de ruido debería separar qué parte del ruido medido se debe a los aviones, pero el micrófono del que dispone es un instrumento tonto, sensible a la intensidad del sonido, pero incapaz de distinguir de dónde proviene el impacto acústico.
Según sus autores, este trabajo permitirá sustituir los sistemas de detección y clasificación rudimentarios que emplean los monitores de ruido comerciales, complementando la identificación efectuada mediante el seguimiento de los aviones por radar.
Su innovación se basa en técnicas de reconocimiento estadístico de patrones. Dichas técnicas discriminan qué ruidos son los que producen los aviones con respecto a otros como, por ejemplo, el generado por el tráfico de automóviles, incluso en los entornos más alejados del aeropuerto. De esta manera resulta posible reducir las tasas de fallo de los sistemas de identificación.
Este sistema pretende dotar al monitor de ruido de un cierto grado de inteligencia, que le permitirá distinguir si el sonido que mide es el producido por un avión. La herramienta computa fragmentos sonoros de muy corta duración (10 fragmentos por segundo) y realiza un análisis en frecuencia para clasificar cada fragmento como producido o no por una aeronave.
El objetivo de la investigación es avanzar en el conocimiento y la mejora de las técnicas de identificación y medida de perturbación sonora, principalmente en el entorno de los aeropuertos, abordando problemas concretos, como es la detección e inspección del ruido de reversa.
La infraestructura aeroportuaria va unida ineludiblemente a un alto impacto acústico y en las proximidades del aeropuerto los niveles de ruido son elevados, hasta el punto de que AENA invierte partidas importantes en planes de aislamiento acústico para proteger las viviendas en áreas próximas. Está comprobado que los ruidos que provoca el tráfico aéreo, por tener un mayor componente de baja frecuencia, comportan una mayor molestia para las personas.
Fuente: SINC