¿Qué son los Bancos de tiempo?
El banco del tiempo es una herramienta que fomenta de manera comunitaria servicios de cooperación y solidaridad entre las personas. Mejorando la salud comunitaria y la calidad de vida de las mismas. ¿Quieres conocerlo?
Los bancos del tiempo no son bancos en si, se trata de un sistema económico por el cual usuarios pueden ofrecer o demandar productos o servicios sin que intervenga la moneda oficial del país.
En el banco del tiempo se intercambian servicios y actividades en donde la unidad de intercambio y de valor siempre es la misma para todos, el tiempo. Una hora siempre es a cambio de otra hora, independientemente de los servicios y actividades que tú ofrezcas o demandes.
Mediante el intercambio de este tipo de experiencias se fomentan principios de igualdad, solidaridad, altruismo, integración social, respeto, mejora de las relaciones interpersonales, la autoestima, el autoconcepto, la justicia social,...
¿Qué se puede intercambiar?
Los intercambios pueden ser personales, familiares o grupales y se concretan en actividades muy diversas, en función de las necesidades e intereses de los socios/as. Las más frecuentes son:
- Atención a las personas: acompañamiento a niños/al al colegio, cuidar a personas mayores o acompañarlas al médico, realizar recados o gestiones, etc.
- Cuidado del cuerpo y de la salud: masajes, relajación, cuidado del cabello, maquillaje, reflexología...
- Tareas domésticas: cocinar, hacer la compra, pequeñas reparaciones del hogar (electricidad, fontanería, persianas...), cuidado de animales y plantas, etc.
- Informática: asesoramiento informático, trabajos a ordenador, enseñar a navegar en Internet...
- Idiomas: traducciones, conversación...
- Formación: ayuda en los deberes, clases de música, pintura, dibujo, decoración, etc.
Funcionamiento
Plantea que el dinero convencional actualmente no es suficiente para arreglar todos lo problemas que enfrentan las sociedades. La idea entonces es crear un nuevo tipo de dinero para pagar a la gente por lo que se necesita hacer, valorando las contribuciones por igual y sacándole provecho a las habilidades de las personas, con una hora equivalente a un servicio de crédito.
Los créditos de tiempo son depositados en un banco del tiempo. Pueden ser sacados en cualquier momento y gastado en un gran rango de servicios y oportunidades ofrecidas por los demás usuarios (también el propio banco del tiempo actúa como un usuario ofreciendo y demandando servicios de otros usuarios). Estos planes se denominan actualmente bancos de tiempo, bancos de horas y se promueven como una herramienta de regeneración de la comunidad.
Detalles de todas las habilidades, necesidades y disponibilidad de todos los usuarios están almacenados en el ordenador del banco de tiempo de forma confidencial y así cualquier necesidad puede ser cubierta por la persona local adecuada. Ahora también se pueden cubrir las necesidades en la página de Internet del banco de tiempo, siempre y cuando el banco disponga de ella y el usuario dé su consentimiento para que sus datos estén almacenados en ella. El software de bancos de tiempo graba y cuenta todas las transacciones hechas entre usuarios e imprime los detalles de todas las cuentas.
Cuanto mayor crédito de tiempo circule y cuanta más gente comparta su tiempo y sus talentos entre ellos más rica se convertirá la comunidad. Los cuidados y la cooperación se convierten en la fuerza motriz para el cambio social. Todo el mundo tiene la oportunidad de ser donante y receptor, y por ende, se convierte en un miembro productivo de la comunidad. Trascurrido un tiempo, redes informales de confianza y soporte evolucionan y actúan como una forma de familia extendida, conectando a la gente y respetando su autonomía.
Consejos para crear un banco de Tiempo
Antes de nada es importante investigar si ya existe un Banco de Tiempo por vuestra zona, si es así siempre es una buena idea sumar esfuerzos siempre que sea posible.
En caso de no existir ningún Banco de Tiempo en vuestra zona os damos 5 consejos que os ayudarán en vuestro camino. Podéis ampliar vuestros conocimientos sobre los Bancos de Tiempo a través de la asociación para el desarrollo de los Bancos de Tiempo.
1. Lo primero es tener un equipo de personas convencidas y comprometidas. Todas ellas deben tener claro qué es, y qué no es, un Banco de Tiempo y tener la firme convicción de querer hacerlo realidad.
El trabajo a realizar para velar por el buen funcionamiento de un Banco de Tiempo se puede dividir en cuatro grandes áreas: administración, relaciones internas, relaciones públicas y organización. Demasiado trabajo para una sola persona, un equipo humano hará que el trabajo sea más asequible y fructífero.
2. Para ponernos a funcionar necesitamos como mínimo una oficina de atención al público, un ordenador con Internet, teléfono, material de oficina así como la posibilidad de imprimir talonarios, carteles y/o trípticos para la difusión del proyecto.
Es muy común que los Bancos de Tiempo cuenten con el apoyo municipal para conseguir el espacio y la logística, pero si no tenemos esta posibilidad podemos buscar apoyo en las entidades sin ánimo de lucro que puedan existir por nuestra zona.
3. Los vecinos de tu zona solo van a conocer el Banco de Tiempo si sabes llegar a ellos. Para conseguir este objetivo se pueden organizar reuniones para gente interesada en el proyecto y hacerlo saber mediante carteles, radio/TV locales, redes sociales, etc.
Es muy recomendable participar de las actividades de la zona, como pueden ser: fiestas, ferias, actividades en centros cívicos, etc. Siendo muy útil siempre tener a mano trípticos explicativos para que cualquier persona con curiosidad pueda entender fácilmente qué es un Banco de Tiempo, cómo funciona y cómo puede ponerse en contacto con nosotros.
4. No debemos olvidar nunca que un Banco de Tiempo se centra en las personas y que persigue la creación y consolidación de una comunidad real. Las nuevas tecnologías son herramientas necesarias que nos ayudarán a facilitar los procesos que tienen lugar dentro de un Banco de Tiempo pero nunca deben sustituir el contacto personal.
Nos será muy útil contar con una página Web o un Blog del Banco de Tiempo así como tener presencia en las redes sociales, pero sobretodo vamos a necesitar un software de gestión para el Banco de Tiempo que nos permitirá gestionar de manera sencilla perfiles de usuario, contabilidad, ofertas y demandas.
5. No existe una fórmula mágica que haga que un Banco de Tiempo funcione bien.
Para que un Banco de Tiempo funcione bien se necesita invertir tiempo y esfuerzo. Debemos tener una actitud proactiva que nos permita hacer frente y superar cada nuevo reto que se nos presente.
La parte más mágica llega al verse recompensado constatando que las personas somos más felices cuando colaboramos, cuando descubrimos todo lo que tenemos para ofrecer a los demás y todo lo que los demás pueden ofrecernos a nosotros.
Actualmente, hay 213 bancos de tiempo en España.
Autora: Beatriz Zalama
Fotografía: madridmasd.org
generacionnatura.org