Las tribus nómadas de la selva en peligro
Las tribus nómadas no construyen casas, la selva es su casa. Se trasladan en busca de comida, sin modificar el entorno para conseguirla. Recolectan frutos y raíces o cazan animales. Sin embargo, para algunas comunidades indígenas, cada vez es más difícil seguir este modo de vida. Fieles a sus tradiciones y a la madre naturaleza, admiran con impotencia cómo ambas se destruyen.
La tala masiva de árboles, la construcción de presas o las plantaciones de palma de aceite acaban con un entorno cuidado durante siglos y que supone el único medio de subsistencia para estos pueblos. En el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, recordamos tres tribus nómadas en peligro: los Awás de Brasil, los Hadzas de Tanzania y los Penanes de la isla de Borneo.
-Los Awás son una de las últimas tribus nómadas de cazadores-recolectores que habita la Amazonia brasileña. Carecen de inmunidad frente a las enfermedades que les contagian personas del exterior, lo que conlleva que el 50% o más no sobreviva durante los primeros años tras el contacto.
-En Tanzania habitan los Hadzas, una pequeña tribu de cazadores-recolectores. Conforman un grupo de unos 1.500 integrantes: una de las últimas tribus de África. Se alimentan sobre todo de frutas, raíces y miel, aunque también cazan animales pequeños. Por eso han de moverse para encontrar el lugar idóneo que garantice su subsistencia.
-La comunidad indígena de los Penanes vive en las selvas del interior de Sarawak, en la parte malasia de la isla de Borneo. Son entre 10.000 y 12.000 cazadores-recolectores, que dependen de la selva para subsistir. "Por ello luchan para detener la destrucción de lo que queda de sus selvas y su modo de vida", relata Survival. Los derechos territoriales de los penanes no están reconocidos y su enemigo es fuerte.
Fuente: Consumer