Cómo tener un hígado sano
Han aumentado los enfermos de hígado, es importante que empecemos a conocer mejor a este órgano y que sepamos cuidarlo de una manera eficiente, previniendo así algunas enfermedades. Nosotros hemos querido informarnos con Manuel Barrera Gómez, Jefe de la Unidad de trasplante hepático del Hospital de la Candelaria, Santa Cruz de Tenerife, España.
¿Cada vez hay más problemas del hígado?
Pues sí, la verdad es que sí. Cada vez hay más problemas porque la enfermedad neoplásica, la tumoral abdominal bien sea en el propio hígado o en órganos vecinos, suele dar lesiones metastásicas en el propio hígado como órgano diana, además hoy en día se diagnostica con mas precocidad y las técnicas que se utilizan como tratamientos han avanzado tanto que permiten operar estos hígados.
¿Qué tipos de patologías del hígado son las más comunes?
Sobre todo la enfermedad metastásica, es decir, la metástasis fundamentalmente del cáncer de colon, aparte de eso hay tumoraciones propias del hígado como es el hepatocarcinoma, que también está realmente en ascenso sobre todo en los pacientes cirróticos
¿Cuál es el protocolo de actuación para el trasplante de un hígado?
Es bastante completo porque hay una serie de normas básicas y de objetivos principales en estos pacientes. Primero tienen que tener una edad que suele ser inferior a 65 años, y después tener una enfermedad en el hígado que no se operable y, en segundo lugar, que sea un hígado, normalmente son hígados cirróticos, que tengan una esperanza de vida con una función hepática ya muy alterada. En esos casos es cuando se empieza a pensar en el trasplante y el protocolo que lleva el estudio de estos pacientes es muy complejo porque, para poder ser candidatos a trasplante, tienen que pasar un cribado muy importante de estudios de todo tipo: cardiológicos, respiratorios, hematológicos. Todo eso conlleva que el proceso sea bastante complejo.
¿Afecta la mala alimentación al hígado?
Yo creo que la mala alimentación en concreto no, pero sí que puede influir en que esas enfermedades puedan empeorar. Es decir, una mala alimentación en un paciente que tiene una enfermedad de cirrosis hepática, que potencialmente pueden desarrollar tumores, pues si no tiene una alimentación lo más adecuada posible a esa enfermedad probablemente empeore.
¿Para prevenir el empeoramiento de las enfermedades del hígado, qué alimentos recomendarías?
Sobre todo una alimentación que fuese poco industrializada. Por desgracia, hoy en día en occidente todo esta condimentado, todo lleva muchísimos aditivos, entonces intentaría una dieta baja en grasas, que tuviera mucha fibra y que la ingesta de aditivos fuera lo menos posible.
Entonces, ¿Los productos químicos sí que afectan al hígado?
Podrían afectar en cuanto a que exigen mucho al hígado, no porque vayan a producir enfermedades pero sí que le exigen a ese hígado que está enfermo un rendimiento muchísimo mayor del que se debería.
¿Existen diferencias en cuanto al número de pacientes afectados por problemas en el hígado entre las comunidades autónomas en España?
Depende, si uno habla por ejemplo de la enfermedad maligna, en principio no. Sí que tiene que ver, a lo mejor, el hepatocarcinoma, no con España, sino con distintas zonas a nivel del mundo. Hay zonas donde el virus de la hepatitis B tiene una prevalencia muy alta y, en esos países donde el virus de la hepatitis B digamos campa a sus anchas, pues se desarrollan mas tumores. Por eso en esos países hay campañas de vacunación y de screening, que es intentar detectar precozmente esos tumores.
En España, sí que puede haber diferencias en enfermedades benignas del hígado, por ejemplo los quistes hidatídicos, que son quistes que están relacionados con un parásito que se transmite a través del perro, entre otros animales, y que es muy frecuente en otras comunidades, por ejemplo en la zona de Valladolid.
¿Cree que el hígado ya es un órgano conocido o que aún queda mucho por conocer?
Yo creo que es bastante conocido, desde el punto de vista anatómico lo conocemos perfectamente, y de hecho hoy en día se hacen muchísimas técnicas quirúrgicas que eran impensables hace tiempo. Podemos operar un hígado y quitar el 80% del volumen del hígado y que ese resto que queda el 20% seguir funcionando. Sin embargo, como todas las cosas en medicina, donde más se está investigando y desarrollando es del punto de vista genético, a nivel de terapia molecular...normalmente si hay técnicas o estudios genéticos que nos puedan tratar enfermedades bien sea en el hígado o en otro sitio de otra forma diferente a como lo hacemos ahora mismo. Ahí si que queda un campo, digamos muy importante de desarrollo.
¿Algunas recomendaciones básicas para mantener el hígado sano?
Cuidarlo. En primer lugar, no beber, uno de los tóxicos más importantes no sólo en el hígado, pero bueno, en el hígado sabemos que la situación alcohólica tiene una alta prevalencia hoy en día. Evidentemente, hacer una vida sana en cuanto alimentación.
Hacer deporte, que también eso viene muy bien. Y yo creo que cuidando este tipo de factores, eliminamos la posibilidad de hepatopatías alcohólicas, eliminamos la posibilidad de los hígados grasos, que es muy frecuente en occidente por el tipo de alimentación. Ese hígado graso funciona bien pero es más sensible a enfermedades. Yo creo que esas son las recomendaciones básicas.
Ruth Herrera
GeneracionNatura.org
Fotografías: ucsf.edu/Ruth.herrera@generacionnatura.org