La importancia del reciclaje de las pilas y baterías

Por lo menos 30 por ciento de cada pila está constituida por sustancias químicas peligrosas, tales como mercurio, plomo, litio, cadmio y níquel y se estima que cada mexicano utiliza un promedio de 10 pilas al año, muchas de ellas "piratas".
A pesar de esto, las pilas no reciben el manejo especial que amerita un residuo peligroso sino que van a parar a los tiraderos municipales, donde las carcazas sufren de corrosión debido a la acción climática y procesos de fermentación de la basura, con lo que sus compuestos tóxicos se escurren (lixivian) contaminando suelos y cuerpos de agua. Además, la mayor parte de las veces, las pilas y baterías terminan siendo quemadas en estos basureros, lo que aumenta la contaminación por la generación de compuestos peligrosos y cancerígenas, como son las dioxinas y los furanos
A continuación conoceremos los distintos tipos de pilas, su uso, su composición y qué hacer con ellas:
Pilas botón : Pilas que se utilizan en relojes, calculadoras, etc. A pesar de su reducido tamaño son las más contaminantes. De óxido de mercurio, con un contenido de este elemento de alrededor del 30% de su peso, éstas se utilizan en los relojes de pulsera y calculadoras de bolsillo.
Ánodo de litio : No llevan mercurio en su composición y tienen un tamaño ligeramente mayor que las anteriores. Se utilizan para relojes y calculadoras.
Zinc-aire: Con un contenido de mercurio próximo al 1% de su peso.
Óxido de plata : Tienen un contenido de mercurio de cerca de 1% de su peso.
Pilas de petaca o cilíndricas: Contienen menos metales pesados, pero se producen en mayor cantidad. Cuando incorrectamente son tiradas con el resto de los desechos van a parar al vertedero o a la incineradora y es cuando el mercurio y otros metales pesados tóxicos llegan al medio ambiente y perjudican a los seres vivos. Siguiendo la cadena alimentaria, el mercurio puede afectar al hombre.
Si realizamos una recolección selectiva, las pilas se llevan a una planta de reciclaje donde el mercurio se separa de otros metales y el resto de materiales que constituyen las pilas pueden ser recuperados.
De esta manera, se recicla un residuo peligroso y se evita que pueda contaminar el medio ambiente y perjudicar la salud.
Pilas normales: Salinas de carbón-zinc, también llamadas pilas secas. Tienen un contenido de mercurio inferior al 0,025% de su peso total. Se utilizan para linternas, juguetes y aparatos mecánicos. Alcalinas de manganeso, con un contenido de mercurio que ronda el 0,1% de su peso total.
Todas son muy contaminantes porque liberan los metales pesados (zinc, litio, mercurio, etc.) que contaminan las aguas y los animales que viven en ellas, por ejemplo los peces.
Además contaminan durante muchos años porque van liberando los metales pesados poco a poco. Pequeñas cantidades de metales pueden contaminar grandes cantidades de agua.
"Hablando de contaminación: una pila de las normales de 1.5 v. puede contaminar hasta 167.000 litros de agua, una pila de botón (mercurio) puede contaminar hasta 600.000 litros de agua.
¡El mercurio es el más peligroso!. Los animales que están en contacto con él lo acumulan en el organismo hasta llegar a producir malformaciones e incluso la muerte.
Algunas Consejos y recomendaciones:
-Reduce el uso de aparatos que utilizen baterías.
-Los relojes mejor que sean automáticos y las calculadoras solares.
-Utiliza pilas recargables. Su uso cuesta hasta 450 veces menos que las normales. Son mas caras pero a la larga durán más.
-Evita las pilas-botón, si tienes que comprarlas, elige las de litio, las de zinc-aire o de óxido de plata, que no tienen o tienen muy poco mercurio.
Para deshacerte de las pilas, deposítalas siempre en contenedores especiales para ellas y en centros de acopio.
Fuente: Biodegradable.com