Jardines verticales
Esta aplicación se basa en que las plantas no necesitan tierra, ya que la tierra no es más que un medio. Sólo el agua y los múltiples nutrientes disueltos en ella, junto con la luz y el dióxido de carbono, son esenciales para las plantas. Allá donde el agua no falta nunca, como en los bosques tropicales, las plantas se extienden sobre los troncos de los árboles y las rocas de los acantilados, entre otros.
Los elementos que configuran este tipo de intervenciones son:
• Estructura metálica: Se trata de una estructura vertical autoportante, y es la base sobre la que descansan la estructura auxiliar y todos los elementos constitutivos del Jardín vertical. Esta formada por seis torres principales y de un sistema de perfiles tubulares. Forma una capa de aire que actúa como un sistema de aislamiento térmico y fónico muy eficiente.
• Panel de soporte: Está formado por un panel de PVC expandido sujeto a la estructura metálica. Esta capa dota de rigidez a toda la estructura y la hace impermeable.
• Capa de irrigación: Formada por una manta doble de fibras sintéticas y una lámina plástica en su cara interior, está fijada mediante grapas al panel de soporte. Es la base de apoyo de toda la plantación. El fieltro es especial, por lo que no se pudre, y su enorme capilaridad permite una distribución homogénea del agua. Las plantas se han distribuido a lo largo de esta capa de fieltro (la densidad es de unas 30 plantas por metro cuadrado) y las raíces crecen a lo largo de ella.
• Plantación: Se realiza insertando las raíces de las plantas, sin tierra, entre las dos capas de la manta y fijándolas mediante grapas.
• Suministro de agua y nutrientes y recogida del agua: Una red de tuberías, con boquillas de goteo y alimentada por una bomba de agua y nutrientes, va fijada sobre la manta de enraizamiento. El riego del agua, enriquecida con nutrientes, se realiza desde la parte de arriba de la estructura, y es automático. El agua que se escurre por el muro es recogida por una canaleta colocada en la parte inferior del Jardín vertical. De esta manera se soluciona el problema que podría generar el agua de escorrentía sobrante.
Gracias a su efecto de aislamiento térmico, permite reducir el consumo de energía (en invierno, aísla del frío; en verano, actúa como un sistema de refrigeración natural) y limpia el aire (las partículas de polución son atraídas por el fieltro, donde poco a poco se descomponen y remineralizan, convirtiéndose entonces en fertilizante para las plantas).
Este tipo de jardines puede desarrollarse en cualquier pared, sin limitación de tamaño o altura.
Este tipo de soluciones son muy prácticas para ciudades, en especial en áreas áridas y calurosas, ya que estos muros pueden formar parte de las paredes externas de un edificio, ayudan a refrescarlas y se pueden convertir en un valioso refugio para la biodiversidad, acercando la naturaleza a la vida cotidiana de los ciudadanos.
Jardín vertical Zurnek
Los módulos están disponibles en 3 medidas, de 50, 70 o 90 cm de ancho y 163 cm de alto en la tienda de productos ecológicos EKOIDEAS.
Los módulos Zurnek para huertos o jardines verticales son un excelente sistema de cultivo urbano que te permite cultivar en poco espacio una gran variedad de plantas. Están fabricados en madera maciza, con un tratamiento al agua que la protege de la lluvia y el sol. Los accesorios son de acero inoxidable.
Los módulos están disponibles en 3 medidas, de 50, 70 o 90 cm de ancho y 163 cm de alto, para que quepan en el balcón más estrecho y puedan también, combinando módulos de distintas anchuras, cubrir cualquier pared que desees.
Sus distintos niveles están diseñados para poder cultivar con comodidad en cada altura en función de la planta elegida, pudiendo acceder a las plantas por ambos lados. Las barandillas de acero inoxidable protegen las jardineras y macetas incluso en los días de más viento.
También son muy útiles para personas con movilidad reducida, y para personas mayores que tienen dificultad para algunos movimientos.
Los módulos verticales de madera permiten construir auténticos huertos verticales en terrazas, azoteas y patios. Permiten disfrutar de la experiencia de un huerto a escuelas, residencias, oficinas, etc.
Configuración:
Las distintas anchuras disponibles permiten, combinando módulos de distintas anchuras, cubrir cualquier pared.
- Retirando las barandillas puedes colocar pequeños árboles frutales, que quedarán resguardados del viento por la estructura de madera. Si quieres poner plantas no muy grandes, móntalo con todos sus elementos. Siempre podrás retirar baldas o barandillas según vayan creciendo.
- Cambia los soportes de las barandillas de dentro por los de fuera para apurar al máximo el espacio si tu balcón tiene muy poco fondo.
- Retira alguna balda pero deja las barandillas. Con plantas trepadoras podrás utilizar las barandillas como guías, sujetando los tallos con sólo unas cuerdas o bridas.
Fuente: ECOINTELIGENCIA - ECOIDEAS