Cada niño aprende según los ocho tipos de inteligencia
No hay una única inteligencia, sino ocho. De ahí que se reconozcan otros tantos modos de aprender. Según la denominada teoría de las inteligencias múltiples, cada una de estas se localiza en una parte del cerebro, por lo que unos ejercicios adecuados servirían para estimularla y fomentar el aprendizaje de los niños.
Hay niños que les cuesta más de lo normal aprender lo dado por el maestro en el aula, directamente lo relacionamos con que tiene un problema de atención o desinterés por aprender, pero puede que no se le esté enseñando de la manera correcta. Según la teoría de las inteligencias múltiples, hay más de un modo de aprender. La propuso en 1983 Howard Gardner, para quien sería conveniente que las actividades desarrolladas en el aula respetaran el modo de aprendizaje de cada niño y sus capacidades. Si todos los menores no aprenden igual, tampoco se les puede enseñar de la misma manera.
Cada una de las inteligencias resaltadas por Gardner se localiza en una zona del cerebro. Esto explicaría que a cada persona se le den mejor unas materias que otras o que tenga una preferencia. Las inteligencias son: lógico-matemática, lingüístico-verbal, intrapersonal, interpersonal, musical, visual-espacial, naturalista y corporal-cinestésica. Todas ellas serían distintas y semi-independientes.
El Colegio Montserrat de Barcelona explica en este portal en qué consiste esta teoría y cada uno de los ocho tipos de inteligencia:
Inteligencia intrapersonal. Se refiere a los pensamientos y sentimientos, es decir, "a la autorreflexión y autopercepción que una persona tiene de sí misma".
Inteligencia interpersonal. En referencia a las relaciones con los demás, la empatía y la elección de las amistades o de la pareja, entre otras personas. Se relaciona con docentes, psicólogos y políticos.
Inteligencia lingüístico-verbal. Esta inteligencia guarda conexión con el lenguaje y, por lo tanto, con el dominio de las palabras y el modo de expresarlas. Se enmarca en ella a escritores, poetas y políticos.
Inteligencia lógico-matemática. Quien desarrolla la inteligencia lógico-matemática aumenta su capacidad para realizar cálculos, resolver problemas de lógica o comprender conceptos abstractos.
Inteligencia visual-espacial. Arquitectos, gráficos artistas del diseño, cartógrafos, diseñadores industriales y artistas visuales se relacionan con esta inteligencia. Este tipo de inteligencia se localiza en el lado derecho del cerebro y facilita la orientación o la lectura de mapas y gráficos, entre otros.
Inteligencia musical. Sensibilidad al ritmo, al tono y al timbre, según el Colegio Montserrat, son los tres rasgos que caracterizan a la inteligencia musical. Quienes la desarrollan cuentan con una mayor sensibilidad a la música, ya sea para cantar, para tocar un instrumento o para componer.
Inteligencia cinestésica. Puesto que se refiere al cuerpo, se relaciona con quienes realizan movimientos corporales coordinados, como bailarines, deportistas o artistas que utilizan las manos, entre otros. Se estima que estos unen cuerpo y mente.
Inteligencia naturalista. Como su nombre indica, está relacionada con el mundo natural y la capacidad para comprenderlo. Se entiende que desarrollan más esta inteligencia quienes destacan por su capacidad de observación del entorno. Se relacionan con ella biólogos, veterinarios y excursionistas.
Como cada inteligencia destaca por unas características, cada persona que la desarrolla, también. Es por ello que se entiende que no se puede enseñar a todos los niños del mismo modo. Existen distintos recursos se adaptan para desarrollar o potenciar las habilidades de los niños en el aula o en casa, sin entorpecer las capacidades de cada uno, tan solo se ha de captar cuál es su modo de aprendizaje idóneo y trabajar en él.
Fuente: Consumer